Como el mundo es redondo se aconseja no situarse a la izquierda de la izquierda, porque por esa pendiente el distraído, suele quedar de pronto a la derecha.Hay que escoger entre ser viento o ser veleta.
Armando Tejada Gómez - Poeta comunista

lunes, 12 de agosto de 2013

Patria Grande: Ni un paso atrás


Las últimas semanas mostraron más crudamente el accionar del imperialismo así como un nuevo momento en la integración y estrategia de Latinoamérica. La reunión del MERCOSUR y los encuentros de Cristina y Maduro con Santos, expresan la necesidad de ahondar los esfuerzos para defender los logros de la región.

Las últimas semanas han sido para los países de América Latina, semanas de nuevos aprendizajes y de una etapa superior en el fortalecimiento de la unidad e integración necesaria para enfrentar al imperialismo yanqui que, con distintos mecanismos, busca interrumpir el proceso de construcción de la Patria Grande. A veces provoca frontalmente como con la detención del compañero presidente Evo Morales, otras seduce con “cantos de sirena” para dividir a los países de la región, o fogonea nuevamente conflictos armados como el que ya había sido superado entre Venezuela y Colombia tras la intervención de Néstor Kirchner como presidente de la UNASUR.
Hace unos días se realizó en Venezuela un encuentro entre los mandatarios Nicolás Maduro y Juan Manuel Santos, luego de un período de tensión tras el recibimiento que éste le hiciera a Henrique Capriles, absoluto perdedor en las pasadas elecciones presidenciales y representante de los intereses yanquis en la hermana Venezuela.
“Cuente Colombia y usted, Presidente, con los mejores esfuerzos que podamos hacer para que la paz llegue a buen puerto. Tiene que llegar la paz en Colombia, que es la paz en Venezuela y en Sudamérica”, expresó el compañero Maduro. En la reunión se trataron temas como el de la energía, el comercio, la seguridad y el narcotráfico.
Esta reunión fue precedida en días, por la visita a Colombia de nuestra Presidenta que precisamente reivindicó “esta construcción de la patria de la América del Sur, de la UNASUR, que ha podido resolver sus conflictos sin intermediación de organismos internacionales que no alcanzan a resolver los conflictos que se han planteado”. A su vez, y para defender los logros y el rol que viene jugando la región desde el punto de vista político y económico, enmarcados en la crisis global y la nueva configuración del mundo, Cristina subrayó que a pesar de “ser gobiernos que no piensan igual acerca de todo”, es necesario “ponernos de acuerdo en lo fundamental”. En el contexto de la reunión se firmaron, entre otros, convenios de prevención e investigación del delito de trata, de cooperación en el área de deportes y un tratado de extradición según los principios del Derecho Internacional.
Una semana antes se había llevado a cabo en Montevideo, la 45º Reunión Ordinaria del MERCOSUR en la que se celebró la asunción de Nicolás Maduro a la presidencia pro témpore, así como el ingreso del Estado Plurinacional de Bolivia como miembro pleno. Los Estados caribeños de Guyana y Surinam se incorporaron como miembros asociados; los gobiernos de Cuba, Ecuador, Chile y Honduras, también participaron de la reunión.
Respecto de las últimas provocaciones del imperialismo, el MERCOSUR repudió firmemente la afrenta de la que fuera objeto el compañero Evo Morales, condenó las acciones de espionaje por parte de agencias de inteligencia de los Estados Unidos para con los países de la región y reivindicó el derecho al asilo político por parte de los Estados. Por otra parte el bloque del MERCOSUR, hoy ampliado y fortalecido, decidió levantarle la sanción a Paraguay -había sido suspendido luego del Golpe de Estado perpetrado contra Fernando Lugo- a partir de la asunción de su nuevo presidente electo.
De los temas que se expusieron, el de los millones de compatriotas incluidos a partir de la creación de fuentes de trabajo, estuvo en primer plano, así como el de seguir agregando valor al trabajo, el de la industrialización y el complementariedad entre los países.
De esta manera, y en tres escenarios distintos, es como se yergue Latinoamérica y el Caribe fortaleciendo su integración para enfrentar la ofensiva del imperialismo.

jueves, 1 de agosto de 2013

CHILE: BACHELET ENFRENTARÍA A LA HIJA DEL ASESINO DE SU PADRE

Una pelea inesperada



La ex presidenta puede competir con la oficialista Evelyn Matthei en las próximas elecciones. La ministra de Trabajo de Piñera es la elegida del mandatario, pero todavía debe sortear la resistencia de otros dirigentes de la derecha.


En las elecciones primarias del 30 de junio Pablo Longueira, líder de la conservadora Unión Demócrata Independiente (UDI), se convirtió en el candidato del oficialismo tras ganarle a su rival Andrés Allamand, del partido Renovación Nacional (RN). Pero la alegría de la victoria, tras dos meses intensos de campaña, duró apenas una quincena. El miércoles 17 de julio el hijo de Longueira, Juan Pablo, enfrentó a los medios de comunicación y anunció que su padre se bajaba por un problema de salud. Ni una operación de urgencia ni una enfermedad terminal: “Un cuadro de depresión médicamente diagnosticado”, dijo y sorprendió a todos. Y así, a sólo cuatro meses de los comicios presidenciales –que tienen fecha para el 17 de noviembre– la Alianza por Chile se quedó sin candidato.
Pero enseguida la UDI nominó a la mujer que podría enfrentar a Michelle Bachelet (Nueva Mayoría): Evelyn Matthei, la ministra de Trabajo del actual presidente, Sebastián Piñera. Sin embargo, los dirigentes de RN no apoyan la candidatura porque prefieren que el representante de la alianza sea de sus propias filas.

Pese a que el último lunes las principales figuras de Alianza por Chile anunciaron que antes del 17 de agosto, día en que vence el plazo para presentar candidatos, realizarán una primaria cerrada para los militantes del partido, donde podrán elegir entre Matthei y Allamand, todo parece indicar que la batalla por el sillón presidencial de Chile será entre dos mujeres. La ministra de Trabajo tiene un 50 por ciento de aprobación de su gestión y nunca perdió una elección (fue diputada y senadora). Además, siendo una campaña corta, hay un dato que los expertos califican de fundamental: es la funcionaria más conocida de todo el gabinete, con un 96 por ciento de reconocimiento, según las encuestas.

De 59 años, rubia, ojos claros y dueña de un carácter temperamental, Matthei nació en el seno de una familia alemana y de religión luterana. Durante su adolescencia vivió en Londres, donde su padre era agregado militar aéreo. Al regresar a Chile comenzó a estudiar ingeniería industrial en la Universidad Católica. Allí fue alumna de Sebastián Piñera, que luego le dio trabajo en varias de sus empresas.

Juntos militaron en RN hasta 1993. Ese año Piñera y Matthei fueron precandidatos presidenciales por el partido pero tuvieron que renunciar a las candidaturas cuando ocurrió un episodio denominado por la prensa “Piñeragate”, en el cual se dio a conocer una conversación telefónica donde el actual presidente se refería en malos términos a su rival e intentaba dejarla en ridículo. El motivo por el que Matthei también debió renunciar es que reconoció haber filtrado la grabación que había conseguido de forma ilegal por un servicio de inteligencia del ejército, gracias a los contactos que le quedaron cuando su padre estaba en funciones. Finalmente, Matthei no sólo se bajó de la contienda electoral sino que además renunció a RN y se pasó a las filas de la UDI.

Durante años, los políticos estuvieron sin hablarse pero cuando Piñera llegó al Ejecutivo, Matthei, que era senadora, se convirtió en una férrea defensora de su gobierno, enfrentando incluso a su propio partido. Y para sorpresa de todos, esa actitud la llevó a convertirse en ministra de Trabajo y una de las preferidas del presidente, que hoy apoya fervientemente la postulación.

De concretarse la candidatura, la mayor perlita de las elecciones no será que se enfrentan dos mujeres, sino la historia que une a estas políticas. Las familias Bachelet y Matthei fueron muy amigas en la juventud, ya que Alberto y Fernando, padres de Michelle y de Evelyn, respectivamente, fueron generales de la fuerza aérea. La ruptura entre ellos se dio con el golpe de Estado del dictador Augusto Pinochet: Matthei fue miembro de la junta militar mientras que Bachelet cayó preso por su lealtad con Salvador Allende. Alberto murió torturado y en prisión. Los hechos que siguen parecen guionados por un director hollywoodense: la persona investigada por este crimen es nada menos que Fernando Matthei. Sí: el padre de Evelyn Matthei está acusado de matar al padre de Michelle Bachelet y ellas, posiblemente, se enfrenten en las urnas.
Sin embargo, Matthei niega que su padre haya tenido algún rol en el asesinato de Bachelet, dado que “estaba fuera del país cuando ocurrió el asesinato”, mientras que hay varios testigos que reconocen a Matthei en la comisaría donde se encontraba Bachelet. Hace un mes la Justicia reabrió la investigación, por lo que habrá que esperar unos días para que se conozca el fallo.

En tanto, el padre de la candidata de la UDI también es recordado por su colaboracionismo con Gran Bretaña durante la guerra de Malvinas. Hace unos años reconoció: “Hice todo lo posible para que la Argentina perdiera la guerra”.

Pese a que la derecha está dividida en cuanto al candidato que enfrentará a Bachelet, todos reconocen que la unidad de la fuerza es fundamental para ganar la elección o al menos obtener un resultado digno. Habrá que esperar unos días para que se confirmen los pronósticos: una batalla entre mujeres que se juegan no sólo el mayor cargo político sino la dignidad de su familia.